En el lado derecho de la Surface Laptop, encontrará el puerto ancho y delgado para el cargador patentado de Microsoft. A la izquierda, un conector para auriculares, un puerto MiniDisplay y un único puerto USB 3.0. Esto ha creado una controversia. USB-C es el futuro de los puertos. Es mejor, más rápido, más pequeño y a todos les encanta. Entonces, ¿por qué Microsoft usó ye-ol’ 3.0? Porque casi todas sus impresoras, cámaras, discos duros externos y micrófonos de podcasting todavía lo usan. Microsoft tomó una decisión pragmática: la Surface Laptop hace la vida más fácil y libre de dongles ahora, y potencialmente un poco más difícil en unos años cuando tenga más equipo USB-C. Personalmente, creo que uno de cada puerto podría haber sido la decisión correcta, especialmente porque ¿quién todavía usa MiniDisplay? Pero todo lo que tengo todavía usa USB 3.0, y tengo que decir: me encanta la vida sin dongle.
María Lokke / CON CABLE
Sobre todo, me encanta que Microsoft haya creado una computadora portátil para la forma en que vivo ahora. Aún así, Redmond podría haber tomado prestadas algunas funciones de otras computadoras portátiles con Windows, como la pantalla sin marco de la Dell XPS 13 o la bisagra de 360 grados de la HP Spectre X360. Cualquiera de los dos haría que la pantalla táctil y el lápiz óptico de la Surface Laptop fueran más útiles. Incluso Surface Book funciona de varias maneras gracias a la pantalla desmontable. Sin nada de eso, me veo obligado a alcanzar todo el teclado para pellizcar y rotar, y no puedo encontrar un ángulo cómodo para usar el lápiz óptico. Microsoft lo sabe, por cierto; sus otros dispositivos Surface cuentan con soportes y bisagras ultraflexibles para mejorar el lápiz y el tacto. Surface Laptop es compatible con ambos, pero solo optimiza el mouse y el teclado.
Entonces, Surface Laptop existe para servir a las personas que viven y mueren con el teclado y el trackpad. Ambos excelentes. El panel táctil se mueve más suavemente que casi cualquier otro que haya usado: se une al MacBook Pro y al Chromebook Pixel como mis «pads» favoritos. El teclado ofrece mucho recorrido y mucho espacio, aunque las teclas ligeramente cóncavas se sienten un poco blandas a veces.
Windows 10 Menos
Cuando Microsoft lanzó Surface Laptop, su característica más promocionada era Windows 10 S, una versión simplificada y más segura de Windows 10. El software funciona muy bien para escuelas y empresas, que administran flotas de computadoras, e incluso para personas con necesidades informáticas básicas que Benefíciese de una protección mejorada contra malware y virus.
Todo lo que hizo Windows 10 S fue volverme loco. Cuando encendí por primera vez Surface Laptop, la asistente virtual de Microsoft, Cortana, me guió a través de un largo proceso de configuración que podría haber hecho yo mismo en la mitad del tiempo. Cuando traté de descargar Google Chrome, una ventana emergente dijo que no, lo siento, no está permitido, pero no se preocupe porque el navegador Edge de Microsoft funciona mucho mejor. (No. Ni siquiera cerca). Busqué 1Password, Photoshop, Adobe Audition, Spotify y una docena de otras aplicaciones que uso todos los días, sin éxito. A veces, Microsoft lo dirige al equivalente de la tienda de Windows de la aplicación que intentó descargar, pero eso generalmente falla. Microsoft claramente espera que 10S sea lo suficientemente exitoso como para que los desarrolladores coloquen sus aplicaciones de Windows en la Tienda, pero eso presenta un desagradable problema de huevo y gallina. Sin más aplicaciones, 10S equivale a un navegador mediocre y muchos dolores de cabeza.
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Afortunadamente, actualizar a Windows 10 Pro solo requiere dos clics y cinco minutos. Eventualmente costará $50, pero es gratis hasta fin de año. Actualice y tendrá el mismo software que cualquier otra máquina con Windows. La actualización no perjudicó el rendimiento ni la duración de la batería, y convirtió a la Surface Laptop en una computadora portátil con todas las funciones.
Después de la actualización, mi Surface Laptop zumba como una máquina con Windows casi perfecta. El próximo cambio a sofisticados periféricos USB-C podría requerir que obtenga un montón de dongles en el futuro, pero es un riesgo que estoy dispuesto a correr. Mientras tanto, no necesito una mochila llena de basura para hacerlo todo y, en un mar de MacBook Pros en Starbucks, me destaco con una computadora portátil llamativa. Y es una máquina con Windows. Loco.